Otro delirio soñado

Paseamos juntos por el universo si saber que hacer,

Mientras la realidad empezaba a desaparecer.

Tu risa me invita a querer soñar una vida más

Pero en tus confesiones duerme la verdad.


Ya no quiero ahorra mas palabras

pero a estas no te las puedo hacer sentir.

El tiempo pasa como un relámpago virtual,

Y a veces pienso que es parte de una gran mentira.


Eres la causante de todos mis problemas,

Y un delirio ya muy acostumbrado al suelo.

Tristeza que habita bajo la tierra

No crezcas mas, vuélvete a dormir.


Cuarta dimensión descúbrete ante mis ojos hoy,

Pero no digas nada, la cosa es así.

Aventuras de Thelma y Louis, lo soñé o lo viví?

Yo todavía tengo el mercurio aquí.


Rutas sin destinos y ocasos sin fin volvamos a vivir.

La envidia de todo alquimista quiero ser,

También de Ricardo y mi amigo Joaquín.

Adiós, búsquenme, ella sabe a donde fui…

El viaje

Dicen que hay un sol y un angel
dando vueltas sin parar
como una ruleta encarnizada.

Y que esta ciudad, de noche,
se transforma en un rio misterioso
que divisa dos lunas en lo alto.

No se si tirar mas botellas al mar
o creerme mis mentiras.
Pero la ilusión me pisa los talones.

Tal vez compre una escafandra
y me atreva a irte a buscar,
pero en todo ciclo algo se repite.

Quizás fue la música o el whisky malo
pero me rompiste el esquema
con el que pretendía enamorarte.

Como tintes abstractos e infantiles
quieres pintarme sobre un lienzo teñido
y me enternecen tus risas en el intento.

Alguna vez pensé en ser trotamundos
cargando lucuras y delirios
para no tener que soñar y volar.

“¡Con seis cuerdas ya puedo viajar
y que manera de viajar!”decía yo.
Ahora entendes que solo importa el viaje.

Pasajeras en vuelo.

Ven, tengamos un poco de sexo.
Pero no te enamores, no por favor.
No te quiero para mas de un rato

Ven, tengamos un poco de sexo.
No digas que no te lo advertí,
es eso nomas, y no te ilusiones!

Ven, tengamos un poco de sexo.
Ya sabes, sexo! pero no con amor,
solo quiero disfrutarte un poco mas.

Ven, tengamos un poco de sexo.
Tu me usas, yo te uso, sabes que
al fin y al cabo siempre es así.

Ven, tengamos un poco de sexo,
varias veces, borrachos y extasiados.
Pero no hables, no quiero saber de ti

Ven, tengamos un poco de sexo.
La noche nos espera, somos solo tu y yo,
y mañana sera otra la que me inspire.

Yo quiero ver muchos mas delirantes por ahi..

Nosotros, los locos, somos gente que vive mejor que los demás. Podemos ver mucho mas allá del camino, no necesitamos que nadie nos diga las cosas, podemos ver, imaginar y sentir el porvenir!Somos como un tren simpático que atraviesa la ciudad, con muchos vagones, revolucionando las calles! Creemos en que todo es posible, no nos asustan las utopías, nunca nos quedamos sin colores y sabemos que las monedas tienen mas de dos caras!Pero aveces confundimos el cielo y el mar. Los comunes nos ven como soñadores, y entre nosotros nos vemos como eruditos disfrazando luces!

Pensamientos de soledad

Cuando el color de tus ojos sea mas importante que las diferencias de razas cesaran por fin las guerras y no se si la idea de que el dinero puede comprar la vida perdida sea plausible.
Si las canciones fueran inútiles y absurdas no serian censuradas, es por eso que esa es mi forma de luchar, y sigo sin entender como la ganja que sale de la tierra puede ser peor que la crueldad humana.
La ironía en su punto mas transparente refleja la verdad del hombre que no se atreve a inmortalizar la palabra y es la respuesta perfecta para el que cree que sabe algo en cuanto las preguntas cambiaron su objetivo.
En mi viaje por la vida concluí en que hay tres tipos de personas, las que quieren pasar desapercibidas, las que pasan desapercibidas, y los que como yo, no toleran la uniformidad ni la rutinaria vida del ser común.
Civilización, curiosa palabra, no? no creo que sea digna de de proclamarla nuestra mientras el hombre siga abusando del hombre, y las muecas de la involución humana sean tan visibles en el onanista como en el anciano.
Bárbaros se destiñen y transforman en cronopios a la luz de las armonías que acompañan a tu eufonía.

La caja de Pandora.

Quedamos en juntarnos en el lugar de siempre. Victoria ya estaba ahí cuando yo llegué. Nos prendimos un pucho mientras esperábamos a Augusto.
Pasaba el tiempo y nos inquietábamos más. Sin el no podíamos partir.
En algún momento entre las 22 y las 23 el llegó; traía una bolsa en la mano.
-Tenia que asegurarme que todo estuviera bien, y que Lara no se entere de nada.- dijo Augusto.
-Esta bien…-
-Bueno, no importa. Ya vámonos.- me interrumpió Victoria.
Sabiendo perfectamente lo que teníamos que hacer, nos paramos, caminamos hasta el auto y nos subimos.
Vico llamó al genio de la nube blanca, y Augusto se puso a cantar algo que parecía una mezcla de bossa nova con aires de fito.
El viaje duró varios días, pero cuando llegamos, el tiempo ya no contaba.
Yo fui en busca de tabaco y Absolut al pueblo mientras Augusto prendía la estufa a leña y ella buscaba los libros, la música y las velas.
Para cuando regrese todo estaba listo.
Nos sentamos cerca del fuego, el frio nos comía los huesos. Cada uno tomo su vaso con Absolut y se envolvió en una manta.
Vico nos leyó las frases sin sentido aparente que había formado con fragmentos de sus libros favoritos.
Mientras yo abría la tercera botella, él saco la caja de la bolsa. Era una caja que parecía no tener tapa, ni ninguna abertura. No tenia fondo ni color fijo y brillaba de una manera fascinante. Era hermosa, tenía música propia y era fría y caliente a la vez.
-¡Pandora!- dijo Augusto.
Victoria suspiró
-La gran caja de Pandora- dijo Augusto.
La colocó despacio y con extremo cuidado sobre el parquet.
Brindamos mirándonos los tres a los ojos. No sabíamos que pasaría, si nos volveríamos a ver, si viviríamos o no; Pero si sabíamos que queríamos seguir hasta el final.
Llenamos nuestros cuerpos con la ultima gota de esplendor que quedaba, la ultima gota de libertad y de algo que nos hacia sentir vivos. Dimos las últimas pitadas, nos tomamos de las manos y comenzamos a pronunciar al unísono las frases que Victoria había armado.
Primero todo empezó a dar vueltas hasta que no distinguíamos nada a nuestro alrededor. El piso desapareció, el techo, ¿el techo? Creo que ya se había volado. La caja seguía inmóvil, sin participar del éxtasis del momento, y nosotros pronunciando las frases que empezaban a superponerse y parecían formar palabras en algo parecido al latín.
La caja se abrió... Despertamos cinco días después los tres tirados en el parquet, los vasos a pocos metros de nosotros, alguno medio trisado, y la cera pegada en el piso era lo único que se veía en contraste. Por lo demás pareciese que nada hubiera pasado.
Después de ordenar todo, sacarnos el olor al humo y otras cosas nos subimos al auto y volvimos a la “vida”. Nunca mencionamos ni volvimos a tratar lo que pasó aquel verano en la casa del boque.

Los colores de hoy.

Es como darle pausa, stop
a ese freaky que salta por los aires.
Es como subirle el volumen
al cd que esta mas rayado que vos

Se que te gusta. Se que queres
pero la ruta esta loca
Abrí los ojos!escucha la música!
La conciencia te rompe los esquemas.

Cuidado que esto esta por estallar
y el cielo es solo un rompecabezas.
El sol esta cambiando de color
y tu vitrola rota esta empezando a sonar.

Este flaco demente sabe de mas
que el fracaso no siempre es perder.
Tu música distorsiona la realidad,
yo ya me compre lentes de otro cristal.

El ritmo de este candombe se va.
¡Volvamos todos a brindar!
que la vergüenza no me pisa los talones
y todavía podemos humillar a la razón!